Aún lloramos la pérdida de "Lost" y "True Blood" se antojaba como su sustituta en la pobre parrilla veraniega de series. Siempre he defendido esta serie, una de las pocas que tratan el tema vampírico con decencia. Por favor, que nadie mencione "Crepúsculo" o la aún no estrenada (pero ya adelanto que espantosa) "No soy como tú". Sin embargo, "Bad Blood" me ha decepcionado.
Podría decirse que es un capítulo de paso entre la segunda y tercera temporada, un capítulo que coloca a todos los elementos tras la línea de salida esperando el pistoletazo que haga empezar la magia. Si es así, vale, pues vistos los trailers, parece que nos encontramos ante una gran temporada, dejando "Bad Blood" aparte.
Todos buscan a Bill, desde Sookie o Jessica a Eric o su chanchullera Reina. ¿Pero dónde está? Secuestrado por unos fans de V (no de los lagartos, si no de la sangre de vampiro) que parecen ser hombres lobo (o no, quizá no sean los mismos, ya se verá). Por otro lado, Lafayette consuela a Tara por la muerte de su querido Eggs (asesinado a manos de Jason) mientras su madre intenta comerle la cabeza con sus historias religiosas. Sam sigue la pista de sus ancestros para conocer de dónde vienen sus poderes metamórficos. Por el camino, tiene un sueño erótico (y muy, muy prescindible) con Bill, ya que bebió de su sangre. A todo esto le añadimos un par o tres escenas de sexo y ya tenemos "Bad Blood", título que describe muy bien la desconexión de la trama y la mediocridad del episodio.
Todos buscan a Bill, desde Sookie o Jessica a Eric o su chanchullera Reina. ¿Pero dónde está? Secuestrado por unos fans de V (no de los lagartos, si no de la sangre de vampiro) que parecen ser hombres lobo (o no, quizá no sean los mismos, ya se verá). Por otro lado, Lafayette consuela a Tara por la muerte de su querido Eggs (asesinado a manos de Jason) mientras su madre intenta comerle la cabeza con sus historias religiosas. Sam sigue la pista de sus ancestros para conocer de dónde vienen sus poderes metamórficos. Por el camino, tiene un sueño erótico (y muy, muy prescindible) con Bill, ya que bebió de su sangre. A todo esto le añadimos un par o tres escenas de sexo y ya tenemos "Bad Blood", título que describe muy bien la desconexión de la trama y la mediocridad del episodio.
Uffff!! paso...
ResponderEliminarA mi no me disgustó True Blood ya que sigue bastante fielmente la novela, pero la verdad, añadir sexo a punta pala para captar audiencia me dejó fria. Los libros tampoco matan, esperaba más de ellos. Entre tanto vampiro desmitificado están perdiendo la esencia misma del mito. Prefería a Buffy, la verdad.
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